36 grados, y subiendo

Como contrapunto al temporal de lluvia que estáis padeciendo en casa, hoy en Buenos Aires hemos tenido una temperatura máxima de 36 grados, que ya empieza a aflojar cuando son las cinco y media de la tarde.

Tras una opípara cena anoche en La Caballeriza, un fantástico restaurante junto a los muelles de Puerto Madero, esta mañana hemos recorrido los principales atractivos de la ciudad, desde la Casa Rosada hasta el barrio de Palermo, pasando por el estadio de Boca Juniors, Recoletas, o San Telmo. Después, hemos callejeado mochila al hombro por toda la avenida de Santa Fé para volver al hotel, en un recorrido de unos siete kilómetros en el que hemos podido admirar un espectáculo que sólo puede apreciarse en el mes de noviembre: los jacarandaes en flor esparcidos por toda la ciudad.

En el capítulo de las curiosidades, hemos podido asistir a un relevo de la Guardia Nacional, bien pertrechados ellos con sus chalecos antibala y fusiles Ak-47 (bueno, esto último es una pequeña exageración...) que se despedían de sus compañeros relevados con un beso en la mejilla (sic). Una más de las contradicciones de Buenos Aires, que se nos está revelando como una ciudad paradójica, de fuertes contrastes, en la que conviven el primer, segundo y tercer mundo con aparente facilidad.

Como colofón, un vídeo de la afición de Boca recibiendo a su equipo en La Bombonera. Impresiona, ¿no?